♦Anamaría Mayol

Soñaba el vuelo

Yo enterré todas las muñecas
en el jardín
para que viajaran a la China

les perdí el rastro

pensaba que los túneles
abrirían caminos hacia otros sitios

y soñaba el vuelo de los pájaros
en el trapecio
colgado entre los árboles

nunca pensé en desterrarlas

pero ellas no regresaron
vino la noche oscura

enterramos los libros
que amábamos
para que se salvaran del saqueo

les perdimos el rastro
(la huella sigue profunda en las entrañas)

ya no encuentro túneles
senderos de escape hacia otros sitios
ni tengo ese trapecio colgado
                             entre los árboles

pero sueño otros vuelos

A lo lejos

                                         A mis amigas

Esa tarde dijo
me divorcié de un hombre
que mataba pájaros

sus claros ojos centinelas del mar
se oscurecieron

cayó el atardecer casi sin serlo

el tiempo
se deslizó hacia atrás como una rueda

allí estaba el silencio
de lo que no se nombra

allí entre mis manos
como una marca el tajo

y un nombre
una imagen sobre el polvo y el viento

un asesino de pájaros
en mi reloj de arena
y se sintieron trinos a lo lejos

Pensé que al fin y al cabo
somos sobrevivientes testificando el mundo

el acecho
             los pájaros
la mordaza
             los pájaros
la lluvia
deslizándose en la espalda
             los pájaros

las otras sus plumajes
             los pájaros

sobrevivientes

al miedo la vergüenza la herida
el ala rota

el silencio
             los pájaros
y en mí todo fue ella

con la voz de otras voces
se repetía el eco

me divorcié de un hombre
    que mataba pájaros
        que mataba pájaros
            que mataba pájaros

Con una misma herida cicatrizada en las alas
volvimos a su casa
más desnudas que nunca

rugía inmortal el mar en la ventana

mientras volaban pájaros
pájaros libres
             pájaros
y se sintieron trinos a lo lejos

Desnuda

Desnuda
             estoy desnuda
me saqué la ropa
los zapatos
             el reloj
me quité el gesto de la cara
             la mueca
la careta
esa tristeza colgando de los ojos
cuando no miro

me extirpé la piel
tu aroma
que en las noches me acariciaba
me borré el nombre
la palabra
olvidé el signo
             el lenguaje         la clave

estoy desnuda
             desnuda
voy a parirme desde la piedra
y el viento...

♦Anamaría Mayol. Nacida en La Pampa, Argentina. Desde hace veinte años reside en San Martín de los Andes (Provincia de Neuquén). Ha publicado poemas en varias antologías en su natal Argentina, Uruguay, Perú, México, Puerto Rico y Ecuador. Entre sus libros destacan Riconto (FEP, 2000); Ventanas rotas (Linaje, 2004); Por eso las estrellas (Puentepalo/El Mono Armado, 2007); No se trata de mí (El Mono Armado, 2011); Para no espantar a los pájaros (El Mono Armado, 2012), y Rara especie el amor (La Grieta, 2014). Sus poemas y cuentos breves se han publicado en suplementos culturales y diarios argentinos, en revistas universitarias y culturales y en sitios web. Ha obtenido menciones y distinciones en concursos nacionales e internacionales de poesía y cuento.